La Justicia dictó hoy prisión preventiva para el acusado uno de los imputados por el crimen de Esteban Darío Brito, de 24 años, ocurrido el miércoles pasado cuando fue baleado en Siria y España.
El sujeto implicado, dueño de un conocido local comercial ubicado en avenida Sarmiento al 700, compareció acompañado por su defensa técnica, desde la División de Homicidios, donde quedó detenido luego de presentarse ayer viernes 28 de mayo, a las 11.50. En tanto, el individuo que efectuó los disparos contra la integridad de Brito continúa prófugo.
Sobre las medidas de coerción, el auxiliar de fiscal, Juan Pablo Godoy, quien participó en la audiencia en representación de la Fiscalía, pidió que la situación actual de detención se extienda por el plazo de 60 días, teniendo en cuenta los riesgos procesales, uno de ellos, el peligro de fuga, puesto que al momento del allanamiento, no se encontraba en su domicilio.
El Auxiliar de Fiscal admitió que: “se trata de hecho grave donde el bien jurídico, la vida, fue justamente el que se aniquiló”. Y sobre el entorpecimiento en la investigación, hizo alusión a que su cómplice está prófugo y que el arma no fue hallada.
Por su parte, el acusado dijo ser “totalmente inocente” y no tener responsabilidad en el hecho.
Los familiares de la víctima también pudieron hacer uso de la palabra. La madre le pidió al implicado “que colabore con la causa porque hay un asesino afuera”.
Finalmente, el pedido del MPF fue avalado por el juez actuante, quien entendió que resultaba proporcional y razonable, disponiendo el traslado del acusado al penal de Villa Urquiza, previos exámenes de rigor en virtud de la situación de emergencia sanitaria.
Material probatorio recolectado
Godoy, durante su exposición, hizo mención a la intervención del personal de Criminalística del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) del Ministerio Fiscal, en el lugar del hecho y el informe fílmico recolectado.
En la escena se encontraron cinco vainas servidas calibre. El informe del médico legal forense establece la presencia de “dos orificios compatibles con heridas de arma de fuego en la región dorsal y un orificio en el brazo derecho”.
También hizo alusión al documento preliminar de autopsia realizada al cuerpo de la víctima que indica “traumatismo abierto por heridas de proyectiles de arma de fuego”.
Aún restan los informes balísticos, los informes toxicológicos, peritaje de los celulares y los elementos encontrados en el Renault Clio. A su vez, destacó la declaración de un testigo que ubica al imputado en la escena, y la ropa que utilizaron tanto el detenido, como quien efectuó los disparos.
La secuencia
De acuerdo a la teoría del caso, desarrollada por el MPF, el miércoles 26 de mayo en horas de la tarde, y a través de una cámara de seguridad de la zona, se pudo observar un Renault Clio color gris estacionado, cuando llegan dos sujetos caminando.
El primero de ellos, que tenía en una mano una bolsa blanca, ingresa al auto. En ese momento, se habría producido un forcejeo con los ocupantes del auto, tras lo cual este individuo sale despedido de la parte trasera derecha del vehículo, que arrancó a toda velocidad. El otro sujeto, desde la vereda, efectuó la ráfaga de disparos. Brito recibió los impactos (en la espalda y en un brazo) cuando intentaban huir, siendo llevado al Centro de Salud.
La versión primaria, que dieron sus amigos, fue que motochorros habían intentado asaltarlos. Luego, reconocieron que en realidad no tenían el dinero para comprar la droga y que decidieron apoderarse de la misma, aparentemente unos 360 gramos de marihuana, que fueron escondidos en la zona del Hipódromo.